Una persona sin pasiones está tan cerca de la estupidez que solo le falta abrir la boca para caer en ella.
Una persona sin pasiones está tan cerca de la estupidez que solo le falta abrir la boca para caer en ella.
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Este blog es el espejo endeble de una subjetividad férrea y conjunta. La habitación fuera de la caja y la casa de los forajidos.
Quédate y hablemos de solucionar el mundo.
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