Cada vez es más frecuente encontrar en títulos de videojuegos historias altamente complejas y exquisitamente diseñadas. Las experiencias que ofrecen las compañías desarrolladoras se acercan mucho a las cinematográficas, cambiando evidentemente el rol del espectador por el de personaje principal.
Cuando los videojuegos tenían un papel de mero entretenimiento en sus inicios, poco a poco fueron agregando nuevos objetivos, como el desarrollo de habilidades y otro tipo de interacciones. En los últimos años, los videojuegos consisten más en experiencias enormemente inmersivas, que incluyen situaciones complejas de alto componente emocional. Tomas de decisión que ponen a prueba el temple y la moral del jugador, situaciones de acción al más puro estilo hollywoodense y narrativas, al fin y al cabo, que dejan una huella importante al terminar el juego.
La decadencia de los guiones originales en la industria del cine
Sin embargo, mientras uno de los sectores crece a pasos agigantados, parece que el cine va menguando su originalidad y creatividad.
Sin basarme en nada más que la percepción personal, cada vez hay menos guiones originales o historias sin antecedentes en los estrenos de cartelera. Pareciera que a Hollywood se le acabasen las ideas.
Los títulos de cine más exitosos en los últimos años, o al menos los más populares, son adaptaciones de libros, cómics o, incluso, videojuegos. Los que no, son secuelas, precuelas o remakes de películas que se lanzaron hace décadas, que por alguna razón los directores quieren rescatar para renovar ante las nuevas generaciones.
Lo cierto es que, como espectadora, cada vez veo más difícil encontrar ideas nuevas en la gran pantalla. No sé si sea por conveniencias del negocio seguro o por lo que ya se ha estado viendo últimamente. La migración de los guionistas a la industria de los videojuegos.
La complejidad de las historias en los videojuegos
Con estas reflexiones no quiero quitar, ni mucho menos, el mérito de los hacedores de adaptaciones o renovaciones cinematográficas. No es nada nuevo que convertir un libro en película es extremadamente complicado, son dos medios distintos y hay que agregar componentes de todo tipo. Interpretación, música, tiempos, diálogos, escenas, fotografía, etc.
No obstante, la falta de creatividad en las historias de cine se ve contrarrestada con el exceso en los videojuegos más actuales. Tramas como las de Red Dead Redemption, Beyond: Two souls, Detroit become human, The last of us, Dark souls, God of War, Assassins Creed o The Witcher, son increíblemente excepcionales.
Por no hablar de dos de los títulos más esperados del año, Cyberpunk 2077 o Ghost of Tsushima, que han elevado las expectativas de los jugadores a lo más alto.
Ni siquiera tenemos que centrarnos en títulos actuales. Otros casos como Zelda ya contaban con grandes historias detrás, que terminaron garantizando un éxito palpable a día de hoy.
En definitiva, multitud de tramas que envuelven al jugador en experiencias únicas. Historias bien elaboradas, complejas y excelentemente bien contadas. Que incluyen todo tipo de situaciones para dar veracidad, dramatismo o tensión al tema. Que presentan personajes inolvidables, diseñados con detalle, a los que el jugador se apega de manera indescriptible. Trabajos en banda sonora y efectos gráficos que aportan el realismo y la inmersión, que constituyen una experiencia única, a la par que cualquier súper producción de cine.
Guiones que más que estar a la altura, superan con creces muchas de las películas que salen de estreno cada año.
Las influencias entre ambas industrias
No hay que olvidar que ambas industrias siempre estuvieron evolucionando de la mano. Muchas de las sagas más famosas del cine se inspiraron en algún videojuego, como Resident Evil o Tomb Raider. Pero también es cierto que la industria de los videojuegos siguió por muchos años la estela de la gran pantalla.
De hecho, podría decirse que los videojuegos nacieron bajo la sombra del cine y fueron creciendo poco a poco a su lado hasta ponerse a la altura. Lo que muchos podrían discutir es quién está liderando ahora. Para mí, en cuando a las historias, los videojuegos.
El futuro de los guiones en los videojuegos con las nuevas tecnologías
Las nuevas tecnologías favorecen del mismo modo ambas industrias. Pero es innegable que los videojuegos juegan, valga la redundancia, con ventaja en este asunto.
El hecho de que el jugador sea en primera persona el protagonista de la historia es algo muy difícil de reproducir en las salas de cine. Tecnologías como la realidad virtual multiplican por mil estas posibilidades, dejando la brecha entre ambas experiencias como un hueco realmente insalvable.
En cualquier caso, el cine siempre seguirá siendo ese gran jefe al que habrá que vencer. Son dos tipos de entretenimiento que no tienen ni el mismo público en muchos casos, ni el mismo objetivo concreto. Por lo que más allá de especulaciones y reflexiones banales, nada está escrito.
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