Disney no es ajeno a los temas de adultos. Aunque normalmente se dirige a un público infantil, siempre hay lecciones profundas que aprender de sus entregas animadas. El Rey León no es la excepción, ya que el asesinato, la traición y la venganza se encuentran presentes en la película de 1994. La historia de un joven príncipe que fue desterrado y regresa para vengar a su padre suena familiar y sí, lo es. Hamlet fue, con mucho, una de las tragedias más famosas de William Shakespeare y El Rey León tomó mucha inspiración en ella.

El tío traicionero

El rey Claudio ha sido retratado de un escenario a otro por muchos actores diferentes, pero los resultados son siempre los mismos. Claudio fue el instigador del complot para tomar el trono de Dinamarca. Orquestó la muerte de su hermano para poder ganar el preciado puesto. Y aunque los métodos difieren entre El Rey León y Hamlet, una estampida versus veneno en el oído, el rey muere.

El fantasma del padre en El Rey León

Muchas producciones de Hamlet interpretaron la aparición del padre fallecido a los ojos del príncipe desdichado de varias formas diferentes. En la película homónima del 2000 protagonizada por Ethan Hawke, el padre le hablaba a través de vídeos. En otras producciones, aparecía como un fantasma. Simba, por su lado, se encontró con el espíritu de Mufasa de manera más literal y con significativa presencia. En todos los casos, el rey debe recordar a su hijo que no olvide quién es y el crimen que se cometió.

Scar como símil del rey Claudio en Hamlet
Scar como símil del rey Claudio en Hamlet
Fuente de la imagen: Disney

Las diferencias entre Nala y Ofelia como parejas del príncipe

No hay una interpretación directa de Ofelia en El Rey León, pero Nala es la que más se le acerca. Ella era la prometida del príncipe, pero ahí es donde termina la coincidencia. Ofelia quedó abrumada por el peso de sus experiencias, soportó los cambios de humor de Hamlet y tuvo que elegir entre su amor y su familia.

Nala, en cambio, se sintió fortalecida por las dificultades. Perseveró y empujó a Simba a regresar al reino para ocupar el lugar que le correspondía. En Hamlet, el reino se derrumbó bajo su propia tragedia. Y lo más importante, Nala no era una figura trágica. Superó sus circunstancias mientras Ofelia fue destruida por ellas.

La huida del heredero

Ya sea en la guarida de los leones o Dinamarca, la muerte de un rey desataría terribles consecuencias. Después de que Mufasa fuera asesinado en una de las escenas más memorables y tristes del cine animado, Scar convenció a Simba de que él era el culpable y que debía huir lejos. El villano esperaba nunca regresara y así ejercer libremente su gobierno de tiranía.

El rey Claudio fue más directo al respecto y ordenó a sus discípulos que mataran a su sobrino. En ambas historias, el traidor tenía el mismo objetivo.

Los amigos en el exilio

El alivio cómico es algo necesario en las tragedias, especialmente en obras tan sufridas como Hamlet. Rosencrantz y Guildenstern eran amigos de la universidad de Hamlet y le quitaron algo de hierro a los temas más pesados de la historia.

Del mismo modo, Simba conoció a Timón y Pumba, su cohorte en el destierro y con quien regresó a su hogar para la confrontación final.

Nala y Simba como Hamlet y Ofelia
Nala y Simba como Hamlet y Ofelia
Fuente de la imagen: Disney

El amor como hilo conductor entre Hamlet y El Rey León

El amor es el elemento conector entre ambas obras. Nada hace más trágica a una historia que la pérdida de un ser amado, y nada hace de una película infantil un cúmulo de fuertes sentimientos más que estos temas resonando en todo lo alto. Tanto Hamlet como El Rey León tenían sus propios sonetos, por así decirlo.

Hamlet y Ofelia estaban consumidos por la angustia y el amor prohibido durante toda la narrativa. Sin embargo, él le envió una carta en la que profesaba sus sentimientos con la famosa frase «no dudes que las estrellas sean fuego«. Esto se recrea en El Rey León a través de la canción Can You Feel the Love Tonight interpretada por Elton John. La única diferencia evidente es que una se trata de humanos y la otra de leones.

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