La pintura y el arte en general tienen una extraña e íntima relación con el mundo del misterio. Posiblemente la cualidad más importante de la representación artística es la posibilidad infinita de simbolizar lo imposible, lo fantasioso y lo irreal. Ese nexo entre el universo consciente y el onírico muchas veces se desdibuja y se confunde en las obras, tanto en la mente del artista como del espectador. Y da lugar a un sinfín de sensaciones, percepciones y hasta leyendas. En esta inmensidad de posibilidades, hay cuadros y pinturas que terminaron considerándose malditas por unas u otras razones. Unas por su apariencia mística y oscura. Otras por sucesos que acaecieron a su alrededor. El caso de The Hands Resist Him es probablemente el más popular. El que conjuga ambas circunstancias bautizándose como la pintura más embrujada del mundo.

The Hands Resist Him, por Bill Stoneham

The Hands Resist Him, traducido como Las manos lo resisten, es un óleo sobre lienzo pintado por Bill Stoneham en 1972. El cuadro pertenece al estilo surrealista y, según el artista, está inspirado en una fotografía de sí mismo a la edad de cinco años.

En él se encuentra un niño de pie que observa al espectador fríamente y de forma abrumadora. Recibe la luz directa de un sol omiso que destaca sus facciones, su postura erguida y su mirada, inmóvil y penetrante a partes iguales. A su lado y apoyada sobre una columna, hay una muñeca casi tan grande como él que enseña los ensambles de sus brazos, sus piernas y su boca. En sus manos sostiene una pila y unos cables y se mantiene mirando a la nada con ojos negros, huecos y aparentemente sin vida. Ambas figuras están delante de una puerta de madera con ventanucos de cristal, detrás de la que solo se atisba penumbra y oscuridad. Entre la negrura sombría se aprecian varias manos sin cuerpo que parecen arañar la puerta llamando hacia el interior. En conjunto, la escena es triste, tétrica y enteramente escalofriante.

The Hands Resist Him de Bill Stoneham
Fuente de la imagen: Pensamiento Crítico

La simbología del cuadro según el artista

Aunque The Hands Resist Him se inspira en una fotografía de la niñez del artista, creó su obra con un objetivo metafórico y puramente simbólico. La puerta representa la línea que divide el mundo real y el mundo de la fantasía, la vigilia y el sueño. En esta fragmentación, el niño se encuentra en la realidad, pero la muñeca que lo acompaña es la guía que lo conduce por el espectro onírico. Las manos misteriosas simbolizan las posibilidades alternativas de la ilusión, la imaginación y la utopía. Los espejismos que suceden en el otro lado.

La obra final cumple con intención su propósito, pero no deja de despertar sensaciones de inquietud y desasosiego. Puede que ese halo de misterio sea la razón del lado oscuro de su historia.

El misterio de The Hands Resist Him

La primera vez que se exhibió The Hands Resist Him fue durante los años 70 en la Galería Feingarten de Beverly Hills. Allí recibió los comentarios del crítico de arte Henry Seldis en Los Angeles Times. Antes de que concluyera la exposición, el actor John Marley, conocido por interpretar a Jack Woltz en El Padrino, quien se despierta con la cabeza de un caballo entre sus sábanas, compró la obra.

Unos años después y tras haber tenido contacto con la pintura, murieron el crítico, el dueño de la galería y el mismo Marley. Desde entonces se perdió la pista del cuadro, hasta que apareció a la venta en eBay en el año 2000. Según la historia, la había encontrado una pareja de ancianos de California en una antigua fábrica de cerveza, convertida en expositor de arte. El anuncio de la página web afirmaba que la obra estaba maldita y la historia se convirtió en leyenda.

En la descripción, el vendedor se deslindaba literalmente de toda responsabilidad si alguien compraba la pintura. La publicación pronto se hizo popular y empezaron a surgir comentarios y rumores acerca de los efectos de quien observaba e cuadro. Mareos, malestar y experiencias desagradables.

Entre rumores y especulaciones, la pintura recibió alrededor de treinta ofertas, vendiéndose finalmente por 199 dólares. El comprador, de la galería Perception Gallery en Michigan, contactó con el tiempo con el artista para compartir parte de su testimonio.

Las interpretaciones y sensaciones extrañas alrededor de The Hands Resist Him nunca serán comprobables después de todo. Pero las muertes antes mencionadas sí que son ciertas.

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