La serie Gambito de Dama o Queen’s Gambit tomó al mundo por sorpresa y se convirtió inmediatamente en la más vista hasta el momento en Netflix. Su éxito parece ser un misterio, no se sabe si fue el poder estelar de la actriz Anya Taylor-Joy, la composición gráfica de los oscilantes años sesenta o tal vez la popularidad oculta del ajedrez. Posiblemente fueron todas las razones combinadas, pero hay una gran teoría que habla de que el show es, en secreto, una historia de superhéroes.

Claro que Beth Harmon, el personaje interpretado por Anya Taylor-Joy, opta por abrigos elegantes en lugar de una capa y una máscara, pero su historia sigue el camino para convertirse en un superhéroe. Desde su experiencia como huérfana desplazada y el descubrimiento de su don especial, hasta la batalla final para enfrentarse a su mayor oponente o “súper villano”.

La historia de ‘Gambito de Dama’

Basada en la novela homónima de Walter Tevis, Gambito de Dama sigue a una joven de Kentucky llamada Beth Harmon desde las profundidades de la desesperación hasta la fama internacional como gran maestra del ajedrez. Cuando era niña, Beth queda huérfana en un accidente automovilístico. Entra en un internado de señoritas donde se vuelve adicta a los tranquilizantes y descubre el ajedrez en el lugar más improbable del centro, el cuarto de mantenimiento.

Escena de la serie, la primera vez que Beth juega al ajedrez
Fuente de la imagen: Netflix

El señor Shaibel, el conserje del orfanato, enseña a jugar a la niña a regañadientes y pronto se da cuenta de su potencial incomparable. Solo más tarde, después de ser adoptada por una pareja suburbana disfuncional en su adolescencia, Beth comienza a participar en las competencias locales. Allí empieza a ganar popularidad con otros jugadores mientras derrota rival tras rival.

Lo que convierte a Beth en superheroína

Pero la crónica de Beth también es de autodescubrimiento. A medida que crece como competidora, también crece su confianza. Cambia su vestimenta descuidada por la alta costura y se reinventa a sí misma como un una figura del mundo de la moda. La ropa funciona como su disfraz de superhéroe. Cuanto más poderosa crece en su talento, más refinado es su atuendo. Siempre femenino, a menudo estampado con patrones a cuadros en blanco y negro que simbolizan lo evidente, el guardarropa de Beth es tanto una forma de armadura como el traje de Iron Man. Sin mencionar que, como la mayoría de los superhéroes de Marvel, el mayor enemigo de Beth es ella misma.

Dado que Beth cree que sus poderes como jugadora de ajedrez son impulsados por los tranquilizantes y el alcohol, se entrega por completo a la automedicación como medio para aumentar su talento, hasta el punto de ponerse en peligro. Pero sus adicciones son una muleta, la verdadera habilidad de Beth para calcular infinitos movimientos de ajedrez se encuentra en ella misma y no en sus adicciones. Es solo hasta que comienza a escuchar a su grupo de amigos que Beth gana confianza y recibe el entrenamiento necesario para romper sus propios límites.

Batalla final de Gambito de Dama
Batalla final de Gambito de Dama
Fuente de la imagen: Netflix

La revelación del destino de la protagonista en ‘Gambito de Dama’

En la última etapa de la serie, Beth concluye su camino del héroe en un intenso torneo internacional de ajedrez que se juega en Rusia, el país con más jugadores profesionales de la historia. Pero esta competición no es como las anteriores, sino como una batalla definitiva. De hecho, la serie posiciona al ajedrez no como una insulsa búsqueda del talento intelectual, sino como una contienda de alto riesgo que termina en K.O.

El ascenso de Beth coincide con el de un atleta que domina la competencia a nivel local, luego a nivel nacional y finalmente a nivel mundial. Ganándose el respeto hasta de sus rivales más temidos. Así concluye su crecimiento, interno y externo, de manera suprema, alcanzando al fin el potencial completo que tenía como destino. Para muchos, Gambito de Dama es una obra maestra elegantemente ejecutada. La forma en que adoptó los rasgos de un género súper popular para contar una historia menos convencional tomó a todo el mundo por sorpresa.

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