La gran mayoría de la gente, cuando piensa en piñatas, lo primero que imaginan es una una actividad lúdica mexicana divertida para las fiestas de sus hijos. Pero la historia de la piñata revela muchos datos interesantes que van más allá del simple juego.

El origen de la piñata

Las piñatas se originaron en China. Marco Polo fue el encargado de descubrir las figuras de modelado chino de animales, como vacas, bueyes o búfalos, cubiertas con papel de colores y adornadas con arneses y otros atavíos.

Los colores especiales representaban tradicionalmente el Año Nuevo. El objetivo era que las personas golpearan fuertemente la figura con palos de varios tonos hasta lograr romperla. Dentro de las vasijas había semillas que se derramaban por el suelo, simbolizando la fertilidad de la tierra en el año que entraba. Después de romper el objeto, se disponian a quemar los restos y la gente recogia las cenizas para obtener buena suerte durante el nuevo periodo.

Exposición de la piñata tradicional china
Exposición de la piñata tradicional china

Fue en el Siglo XIV que esta costumbre arribó a Europa y se adaptó a las celebraciones de Cuaresma. El primer domingo de la celebración se convirtió en el Domingo de Piñata. La palabra italiana pignatta significa «olla frágil» y originalmentese parecían a recipientes de arcilla para transportar agua. Algunos creen que este es el origen de la forma tradicional de piña.

La costumbre alcanzó posteriormente a España, donde el primer domingo de Cuaresma se convirtió en una fiesta llamada Danza de la Piñata. Los españoles usaban una olla de arcilla que al principio no estaba decorada. Más arde se le agregaron cintas, oropel y papel con flecos que envolvían la olla.

A principios del siglo XVI, los misioneros españoles en América del Norte utilizaron la piñata para atraer conversos a sus ceremonias. Sin embargo, los pueblos indígenas ya tenían una tradición parecida. Para celebrar el cumpleaños del dios azteca de la guerra, Huitzilopochtli, los sacerdotes mexicas colocaban una vasija de barro en lo alto de un poste dentro del templo para marcar el fin del año. Plumas de colores adornaban el objeto altamente decorado y relleno de pequeños tesoros. Cuando se rompían con un palo o un garrote, los tesoros caían a los pies de la imagen del dios como una ofrenda.

La evolución de la tradición hasta estos días

Actualmente las piñatas se pueden encontrar en todas las formas y tamaños. Los productores modernos suelen representar dibujos animados u otros personajes conocidos por la mayoría de los niños. Otras más tradicionales tienen forma de frutas, cestas, cohetes, etc. A veces se satiriza a líderes políticos como presidentes y gobernadores. En Navidad, las piñatas en forma de estrella suelen ser las más populares ya que simbolizan a la estrella de Belén.

Piñatas con la figura del presidente Donald Trump
Piñatas con la figura del presidente Donald Trump

Tradicionalmente, las piñatas se llenan tanto de dulces como de frutas. En la Navidad mexicana, de caramelos envueltos, maní, guayabas, naranjas, jícamas y cañas de azúcar. Algunos tipos de piñatas, llamadas trampas, se rellenan con harina, confeti o agua de flores.

Alguna vez existieron pueblos de alfareros que se especializaban en fabricar ollas piñateras, vasijas de barro desnudas que se venden en el mercado. La gente se las llevaba a casa y les pegaba su propio papel de color. El cartón y el papel maché, a menudo hechos sobre globos, han reemplazado a la olla en muchas piñatas modernas. Sobre todo porque en su momento el barro era peligroso, en específico cuando caía estrepitosamente sobre un niño pequeño. Hoy en día, la piñata ha perdido su simbolismo religioso y la mayoría participa en el juego únicamente por diversión. La versatilidad de la piñata contribuye a su eterna popularidad, creada a partir de una larga tradición alrededor de todo el mundo, encantando fiestas y celebraciones desde tiempos inmemoriales.

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